Manos en la obra

Por Jessica Andrea Guerra Escobar

jguerra3@eafit.edu.co

Hernán Alonso Escobar Gómez es un técnico del Sena en construcción y con especialización en Drywall (construcción liviana) que lleva 6 años en el oficio. Es el tercero de cuatro hijos. Sus padres son Abel Antonio Escobar Adarve y Araceli del Socorro Gómez Luján. Sus hermanos son Angélica, Fabián y Óscar. Está casado con Sara Suleida y tiene con ella una hija, su nombre es Angy Paola.

Sus manos reflejan el oficio y el amor que le tiene a su trabajo. Para él “esto no es solo construcción, es hacer arte”. Confiesa que en la vida no pensó que esta iba a ser su profesión, pero por azares del destino resultó allí. Y como dice el dicho, la legua castiga. Pero, no se arrepiente, en sus anteriores trabajos no se había sentido pleno y ahora siente que transforma espacios y lugares en ambientes agradables.

“Ser un jefe de obra para mí es todo un privilegio ya que personas como nosotros ayudamos a desarrollar un país”, dice Hernán. Una de las ventajas, agrega, es ser autónomo, solo con el pensamiento de hacer las cosas bien.

Son tantas las herramientas que usa que enumerarlas sería arduo. Pero, sin duda, la más importante son sus dos manos que le proporcionan el sustento día a día y las que hacen posible crear todo cuanto permita la imaginación.

Y como todo en la vida es un proceso, así mismo es la construcción, todo se debe hacer paso a paso y con calma.

Estas son las herramientas que usa Hernán Escobar cuando va a enchapar una superficie.

Mezcla de pegacor gris utilizada para realizar enchapes cerámicos de pisos y paredes.

Siempre es necesario calcular antes de colocar cualquier pieza, ya que se debe seguir un diseño previamente elaborado.

Muchas de las piezas se deben ajustar, para esto se usa una cortadora de cerámica y unas pinzas que separan el excedente.

Cuando se tiene tanto la mezcla de pegacor y las piezas se procede a nivelar el piso para poder instalar las cerámicas.

Después de instalar el piso se presionan las cerámicas con un martillo de caucho, que ayuda adherirlas al piso y luego se “lecha” cuando está acabado.